Por Hugo Santiago
Cientos de campesinos del Valle del Mezquital se encuentran manifestándose en estos momentos, en el acceso principal a la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Atotonilco de Tula, denunciando que dicha unidad no acabó con la contaminación, les ocasionó la disminución de las aguas de riego e hizo que perdieran sus nutrientes, generándoles grandes gastos en fertilizantes.
Efraín González Leal, representante de la Unidad de Riego Tula, señaló en entrevista que la Planta de Tratamiento, construida en el sexenio de Felipe Calderón, fue diseñada para solucionar los severos problemas de contaminación en la zona de Tula, sin embargo no cumplió con su cometido.
“No cumple la planta, sigue contaminando al medio ambiente, sigue contaminando los pozos artesanos, sigue contaminando el suelo y el subsuelo, y sigue contaminando los mantos freáticos y los mantos acuíferos y generando gastos millonarios ahora en cuestión de fertilización y abono a la tierra”, dijo.
Señaló que además, las comunidades circunvecinas a la planta, están siendo afectadas por una plaga de moscas, que ocasionan que a niños y ancianos les salgan larvas por debajo de la piel.
Por su parte los campesinos expresaron que antes de la planta no tenían necesidad de abonar sus tierras, pues eran nutridas por la materia orgánica de las aguas negras. Lo que hacía que las 57 mil hectáreas de los distritos de riego del Valle del Mezquital, se ubicaran en producción de granos y follaje, por encima de la Comarca Lagunera.
Sin embrago hoy tienen que gastar millones de pesos en fertilizar, aunado a que con la instalación de la obra federal, se redujo a la mitad el flujo de aguas que utilizan para regar sus cultivos.